*Oferta válida en el 2050, 1 Exabyte = un billón de gigabytes.
Para entender mejor estas cifras imagínese un disco duro con la capacidad de guardar 500 veces toda la data que hay en internet. No, no estoy exagerando; es lo que promete la tecnología de escribir y leer información en ADN desarrollada en el Colegio para Ingeniería Biomédica de la Universidad de Harvard.
Los esfuerzos por crear un dispositivo de almacenamiento biológico no son nuevos, en el 2010 el Dr. J. Craig Venter y su equipo lograron codificar en secuencias de ADN 7920 bits de información digital (escribieron sus nombres en una hebra de ADN), una marca mundial en ese momento. Este año un equipo del Instituto Wyss logró codificar en secuencias de ADN un libro de 53,400 palabras, 11 imágenes JPG y un programa escrito en JavaScript que equivalen a 5.27 millones de bits de información digital, un record impresionante. Explican los doctores George Church, Sri Kosuri y Yuan Gao que el ADN es el medio de almacenamiento más denso y estable que se conoce, al ser volumétrico y no plano como las tecnologías actuales se pueden guardar 100 billones de DVD en un sólo gramo de ADN que puede durar hasta 3 billones de años sin alteración alguna.
Por ahora las desventajas más notorias son la disponibilidad de la tecnología usada y lo lento que es para leer lo escrito en el ADN, pero esto lo hace excepcional para conservar información por muchísimo tiempo.
El ADN contiene instrucciones genéticas muy simples pero poderosas hechas de 4 químicos llamados bases: adenina (A), guanina (G), citosina (C) y timina (T), ampliamente conocidos ya desde la secuencia del genoma humano y de otras especies animales y vegetales. El equipo del Doctor Church utilizó la secuencia del ADN (TGAC) para representar valores binarios, asignando el 1 para T y G y 0 para C y A. Codificando de esto: 0100000101000010 a esto: CAATGGCTAGGTACTATGTATGAGAT, sintetizandolo luego en hebras de ADN, secuenciandolo y finalmente volviendo a decodificarlo para su lectura.
Es obvio que esta tecnología está dando sus primeros pasos y estamos lejos de poder llevar en un «BioUSB» toda información digital creada por el hombre en un año, pero el abaratamiento en los costos del proceso de secuencia y sintésis del ADN nos acercan más a esta posibilidad.
Para ampliar esta información: Harvard | ExtremeTech (inglés).